Las Piedras Poderosas

Introducción

Probablemente en algún momento de la vida te puedas encontrar con variedades de piedras diferentes en su aspecto dónde en si tienen un significado en especial. 

Algunas pueden llegar a generar un poder tan grande en si, que hasta puede lograr cambiarte la vida por completo. Puede causar magia en tí. Es dependiendo de cómo lo veas y consideres para ti. ¡Buena suerte! ✨

Capitulo 1

 Hace tiempo atrás me encontraba en una isla lejana y pequeña. Estaba ubicada en el medio del mar. La isla no tenía mucho más que algunas palmeras, otros árboles y mucha arena.

Empiezo a recorrer para ver si encontraba comida y poder acomodarme para pasar la noche ahí, ya que al otro día me dispondría a reparar la canoa que me llevó hasta allí y por una ola que golpeó fuertemente destrozó mi querida canoa.

Me encamino hacia una palmera que tenía unos cocos y me subo en él para obtener uno para poder tomar el líquido que dispone. Cuando estoy por bajar, desde arriba de la palmera veo hacia abajo para medir la distancia y miro entre el poco pasto que había una piedra de color roja brillante, bajo y la tomo ya que al verla te llamaba mucho la atención por qué tenía una forma muy peculiar, la tomé y guarde en mi bolsillo de mi pantalón y seguí lo que estaba haciendo.

Al otro día, al despertar me dispuse a refrescarme en las orillas del mar y a pescar para el almuerzo. Empiezo a observar detenidamente que en la orilla del mar había una piedra brillante de color amarilla, muy similar a la piedra que tome anteriormente, la tomé y la guardé junto con la otra para luego observarlas con detalle.

Después llegó el momento de prender fuego, así que me dispuse en busca de ramas y piedras para poner alrededor e ir colocando las hojas y ramas a medida del volumen que tomara.

Cuando estaba colocando las piedras veo que en la arena de asomaba apenas una piedra muy similar a la anterior que había encontrado en las orillas del mar, solo que esta vez era de color verde, la tomé y la puse junto con la amarilla y la roja.

Me fuí al lugar donde habitaba, me senté y saqué las tres piedras de distinto color de mi bolsillo y las puse en la palma de mi mano para mirarlas detenidamente. Estuve un par de minutos y no pasó nada extraño, simplemente las tres tenían una forma parecida y brillaban.

Al rato recordé una historia que mi abuela me había contado hace un tiempo atrás sobre "las piedras de la vida".

 Son aquellas que tienen un significado específico, pero también la que están en la mayor parte del tiempo de tú vida.

La piedra roja es el "rubí" que es la de la fortaleza, es la del reflejo hacia esa fuerza interior que tienes en tí, que a pesar del cansancio que pueda llevar, siempre habrá algo que te empujará a seguir adelante a pesar de todo.

"La fuerza que hay en tí, te impulsará a seguir."

La piedra amarilla es el "topacio" que significa la piedra de la fé, a pesar de las dificultades que a veces puedes tener, jamás pierdas la fé en que podrá salir adelante como también podrás llegar más lejos de lo que realmente crees. 

Cuanto más fe le pongas a lo que te propones con más razón se llegará a conseguir.

"La fé toma poder."

La piedra verde es la "esmeralda" es la esperanza significa confía en ti y en lo que te propongas hacer para tu crecimiento y aprendizaje de vida.

" Tú confianza te guiará a dónde vayas."

Luego al reflexionar sobre el significado de cada piedra pensé en aplicarlas en mí.

 Puedo decir que en el lugar solitario y apartado de todo lo único que me quedaba era motivarme con esas piedras para salvarme y buscar una forma de salir de dónde me encontraba.

Así que sostuve fuertemente en mi manos las tres poderosas piedras que consideraba que era así que me puse a pensar que el rubí representa la fortaleza que nace en mí en situaciones de desolación, por ello en ese mismo momento estaba pasando por ese estado. 

A menudo me suele suceder que en el interior de mi ser me nace cierta fuerza que no me explico cómo nace, simplemente al dejarlo pasar eso va aumentando su fuerza y es lo que me empuja a motivarme y seguir con más destreza.

Podría notar que eso mismo me estaba sucediendo en el preciso momento de reparar mi canoa, para poder salir de donde me encontraba.

"La fortaleza es la luz del camino donde te encuentras."

Desde el minuto uno que me encontré en esa isla sola y perdida, la fé que llevo dentro de mí no me ha dejado, por lo contrario ha aumentado.

Dónde ahí mismo confíe más en mí, lo cual aposté en que podría intentarlo y saldría de dónde me encontraba. 

La esperanza me sostuvo en lo que creo ser capaz.

Puedo decir, que al haber pasado un par de meses en esa isla, dónde más de una vez pensé que no llegaría el día donde encontraría la "salida" para volver a la ciudad.

Al fin el día llegó cuando realmente me sentí lo suficientemente decidida en lo que quería de ahora en más. Todo ese tiempo me ayudó a reflexionar sobre las decisiones que tomaba en la vida cotidiana pero también aprendí a sobrevivir. A creer más que nunca en mí y que a pesar que te encuentres solo, siempre podrás salir de donde estás, si realmente te lo propones y confías. 

"Todo lo puede."

Así que ese día terminé de reparar mi canoa y quedó fantástica. La probé en el agua antes de seguir la marcha y me di cuenta que funcionó y mucho más de lo que creía que podría pasar. En esos momentos fué tanta la actitud que le puse que logré mucho más de lo que esperaba.

Logré salir de esa isla, regresé a mi ciudad y en mi bolsillo llevaba esas tres piedras que me acompañaron en toda la supervivencia y me marcaron el rumbo.

"Nada es imposible, todo puede ser posible según como lo veas."